Ceniza y chocolate

General, Poesía

Caderas en camino de convertirse en un destino
atrapado en un cristal, en una condena de frío.
Frente a un espejo te ves a lo lejos desnuda
de los besos que te regaló un sueño.

Luna nueva en el cielo y luces en tu pelo
que buscan el consuelo de un suspiro al vuelo,
caliente desde lo más adentro que una palabra
pudo jamás nacer de todo lo que siento.

La noche es larga y más aún el camino
que te queda hasta compartirla conmigo.
Porque allá donde vas no hay miradas
de olores en flor ni de ningún color.

Graba a fuego el margen entre tus dedos
y mi corazón que no alcanzan por miedo
a dejarlo escapar o a apretarlo demasiado
y matarlo de axfisia al filo de nuestros días.